El poliacryl cuenta con una excelente resistencia, dado que es un componente plástico que se estima, tiene una durabilidad de más de 10 años. Esta cantidad de tiempo puede incrementar según el tipo de mantenimiento que se le dé al producto, por lo que mantener alejados componentes químicos corrosivos, así como evitar impactos que puedan ocasionar daños físicos a la estructura de la lámina, que aunque cuenta con una capacidad de aguante fuerte, no debe ser puesta a prueba de manera constante.

La capacidad de translucidez de este producto es de 60%, por lo que ese porcentaje de luz solar es el que llega hacia el interior de un sitio, generando una iluminación natural, que se ve complementada al mismo tiempo con la calidez del sol, que es capaz de mejorar el ambiente, lo que genera un espacio de trabajo más ameno para el capital humano. Esto también es aprovechado tener un techo que no genera tanto ruido en época de lluvia, al impactar las gotas de agua en contra de la superficie de la lámina.

De igual manera, como otros productos de la marca Ultralam, la lámina polylit no pierde su color debido a la exposición a los rayos solares, por lo que es un producto que estéticamente se mantiene en el mismo estado en que dejó la fábrica de donde salió. Es un material económico, cuyo costo de mantenimiento y de adquisición es bajo, lo que la hace un elemento especialmente bueno para proyectos pequeños o con presupuestos reducidos, que buscan una solución que maximice la inversión que se hace.